En Salta perciben una prometedora exploración para el 2020
Los números en cuanto a inversión exploratoria repuntaron de un año a otro en la provincia norteña: US$ 80 millones en 2018 y US$ 140 millones en 2019. Las autoridades son positivas respecto a la próxima temporada.
“La exploración en la provincia viene muy pujante y eso se nota en la Puna, con los pedidos de permisos que hacen las empresas en la Secretaría y también por el nivel de inversiones que expresan hacer”, indica Daniel Blasco, secretario de Minería de la Provincia de Salta.
Según el funcionario, en el año 2018 las compañías mineras invirtieron en el orden de los US$ 80 millones en sus tareas de exploración y en el 2019 aumentó a US$ 140 millones. “En algunos casos en etapa de exploración avanzada montando instalación para validar, probar o mejorar la tecnología que están pensando aplicar a su planta comercial. Hay que decir que, de esos 140 millones de dólares, un poco más de la mitad es destinada a la exploración de litio”, indica Blasco.
Desde la repartición comienzan en los próximos meses a pedir el detalle de lo que harán las empresas, y qué recursos económicos destinarán para la exploración del próximo año. “En general, con los pocos datos que tengo, con lo que veo, seguirán con la misma idea de explorar el año que viene. Las que tenían planes de exploración en dos, tres, cuatro años, lo van a seguir. Obviamente que la condición macroeconómica y política algún efecto tiene, pero no puedo decir nada todavía con datos objetivos”, señala.
LOS SALARES A FULL
En la provincia hay 19 salares y en todos hay al menos un operador interesado haciendo exploración para producir derivado de litio. “En algunos casos hay más de uno compartiendo una cuenca. Por ejemplo, en Salar del Rincón hay dos empresas, una grande y otra más pequeña. En Salar Centenario Ratones, la empresa Eramine, del grupo francés Eramet, está montando su planta piloto para validar la tecnología y quieren iniciar la construcción de la planta en 2020. El proyecto de Millennial Lithium en Pastos Grandes, que ya tiene presentado el Informe de Impacto Ambiental y Social para una planta comercial, está en trámite y nosotros estamos evaluando. En el Proyecto Rincón, se ha montado una planta demostrativa y una planta piloto un poco más grande, tienen el permiso de la planta comercial y en este momento están trabajando con el financiamiento de la planta comercial”, detalla Blasco.
Los capitales asiáticos desembarcaron en la provincia del Norte argentino, tal es así el caso de Posco que ya construyó su campamento en el Salar del Hombre Muerto. Ganfeng Lithium, que tiene inversiones en Jujuy en el proyecto de Exar junto con Lithium Americas, y en Salta está en etapa de exploración avanzada en el Salar de Llullaillaco.
EXPLORACIÓN METALÍFERA
Blasco menciona dos grandes proyectos metálicos que tendrá la provincia: Lindero, al sur de Tolar Grande, cuya construcción se está terminando y producirá oro y plata a fin de año o en el 2020 y que, en paralelo, la empresa Mansfield sigue explorando. En el proyecto Taca Taca, la compañía First Quantum también continúa la exploración, mientras las autoridades evalúan el Informe de Impacto Ambiental y Social que presentaron a comienzos del 2019. “Es todo un hito porque se producirá concentrado de cobre y molibdeno de carácter mundial. Este año estaría lista la evaluación de ese informe”, dice el funcionario.
“La empresa Yamana Gold vino el año pasado por el proyecto Organullo de oro-plata y también están por iniciar una exploración profunda. Anda dando vueltas Anglo American en varias propiedades de la provincia buscando cobre. La empresa Silex está en un emprendimiento de plata cerca del Salar de Pocitos con exploración avanzada. Y en exploración superficial, o sea en tareas más incipientes, hay muchas más. En boratos, cloruro de sodio, derivados del litio, cobre, oro y plata hay como 70 proyectos en exploración”, comenta.
AGILIDAD EN PERMISOS
En Salta existe el sistema judicial de control de la concesión, es decir, las concesiones mineras son otorgadas por el Poder Judicial. “Las empresas presentan su documentación y los estudios ambientales para arrancar la exploración ante el Juez de Minas y éste nos manda una copia del reporte para que lo evaluemos. Los tiempos burocráticos dependen de los dos poderes, el Judicial y el Ejecutivo. Nosotros, sabiendo que el tiempo es primordial para las empresas, le damos la mayor premura posible. Que sea un tiempo prudente para que no obstaculice las inversiones. En promedio, nos demoramos cerca de dos meses. Los más sencillos salen más rápido y los más complejos requieren un tiempo adicional”, comenta Blasco.